Estoy nuevamente colgado. Me encuentro con un vacío de inspiración tan profundo que ni siquiera me hace reflexionar tonterías como las que ya escribí en otras oportunidades.
Aún sigo en Mardel, el martes 17 parto hacia la gran Capital y ahí empezarán mis crisis y con ellas mis necesidades de comunicarme con el blog y con aquellos que quieran leerme.
Sé que prometí escribir algo del viaje, y que debo la nota sobre lo que sucedió en Ezeiza no bien llegué hace casi un mes. Pero ahora eso no me parece interesante, fue algo circunstancial.
Creo que el hacer nada en La Feliz me achata y me deja sin posibilidades de expresarme. Espero que se solucione al llegar al caos porteño. Quizá haya perdido esas mínimas cualidades narrativas que algunos me elogiaron en este mismo espacio. ¿O será que sólo las tenía en España y quedaron allí, junto con algo de ropa y papelerío que no pude traerme? Veremos, y si es así le digo a mi viejo que me la mande por correo. Total no tengo apuro en que llegue para reencontrarme con ella.
Hasta la próxima.
Aún sigo en Mardel, el martes 17 parto hacia la gran Capital y ahí empezarán mis crisis y con ellas mis necesidades de comunicarme con el blog y con aquellos que quieran leerme.
Sé que prometí escribir algo del viaje, y que debo la nota sobre lo que sucedió en Ezeiza no bien llegué hace casi un mes. Pero ahora eso no me parece interesante, fue algo circunstancial.
Creo que el hacer nada en La Feliz me achata y me deja sin posibilidades de expresarme. Espero que se solucione al llegar al caos porteño. Quizá haya perdido esas mínimas cualidades narrativas que algunos me elogiaron en este mismo espacio. ¿O será que sólo las tenía en España y quedaron allí, junto con algo de ropa y papelerío que no pude traerme? Veremos, y si es así le digo a mi viejo que me la mande por correo. Total no tengo apuro en que llegue para reencontrarme con ella.
Hasta la próxima.
Saludos. JMQ.
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